non possumus (no podemos)

Uno observa con agrado cuando advierte que no todo en la iglesia católica es monolítico y dogmático, porque hay gente que asume sus credos desde la libertad de pensamiento y cuestionan la autoridad, acciones que dignifica al ser humano. Viene esto a propósito de quienes proclaman que "como cristianos que pertenecemos a una sociedad democrática, con recta formación moral, criterios propios y fuertes convicciones, nos repugna que la jerarquía quiera dirigir nuestra fe a golpe de silbato”, en relación a la cruzada vaticana emprendida contra quienes pretenden una práctica homosexual de sus vidas. Y a?aden que “es un tema tal vez discutible jurídica y políticamente, pero no hay sobre él revelación o verdad definida que necesariamente deba obligar a todos los católicos, y menos aún a los que no lo son", para reprochar a los obispos que “esta actitud de la jerarquía, tan silente ante tantísimas injusticias y atropellos de los derechos humanos, es la que hubiésemos esperado cuando la guerra de Irak. Prefirieron mirar hacia otra parte”. A veces tengo la impresión que la Iglesia Católica busca su autoeliminación porque entiende acabado su ciclo vital.