Cautela divina



La Taxa Camarae, promulgada por el papa León X, era un amplio inventario de pecados significativos que podían ser indultados por la Iglesia a cambio de dinero, cómo no, y con lo cual el pagador quedaba limpio de pecado y absuelto ante Dios, aunque no ante la justicia de los hombres.

Me llamó la atención aquel apartado que refiere: «El que por anticipado quisiera comprar la absolución de todo homicidio accidental que pudiera cometer en lo venidero, pagará 168 libras, 15 sueldos». Y por el que Dios reconoce que cualquiera puede matar por accidente como los dictadores.

También ese otro donde avisa: «El hereje que se convirtiese, pagará por su absolución 269 libras. El hijo de hereje quemado o ahorcado o ajusticiado en forma cualquiera, no podrá rehabilitarse sino mediante el pago de 218 libras, 16 sueldos, 9 dineros».

2 comentarios:

franco dijo...

Acabo de leer los demás puntos de dicho documento y de tan burdo suena inconcebible. Como tantas cosas adentro de ese grupo de santos wanna be que desagradablemente ocurren... Ya vendrá la disculpa oficial del papa de turno.

Verónica E. Sanz Salinas dijo...

... pq nos llaman la atención estas cosas, todavía hoy día? es el capitalismo in extremis. Paga por tu fe (o por tu ausencia de), paga por tu vida, o pagarás con ella y por tu muerte...