Gen egoísta


Los hijos serán por nosotros lo que dejamos de ser. Nos redimirán de algunas frustraciones y nos multiplicarán otras muchas.

4 comentarios:

Atzavara dijo...

Discrepo... Los hijos son ajenos a nuestras frustraciones, ni las redimen ni las multiplican. Simplemente las ignoran (o así es como debería ser).

franco dijo...

jaja, yo suelo reirme de vez en cuando de las frustraciones de mi padre porque él justamente busca redimirse en mi de las suyas. Mi madre fue la que menos a destiempo me enseñó cosas, por lo demás, ignoré tanto dichas como frustraciones de los que me parieron.

bonhamled dijo...

Esa posición lleva a un desconcierto total. Los hijos no somos nosotros, por mucho que queramos o se nos parezcan, por lo que hacerles depositarios de nuestras esperanzas y frustraciones es erróneo.
El pensamiento plantea el yo de forma egocéntrica y, creo, que al menos y sin ser precedente para con los hijos no debería aplicarse.

Anónimo dijo...

Lo que no fuimos será nuetra frustracion personal...el exito de ellos solo nos proporciona alegria y tranquilidad de sentirlos felices. Lo no hemos conseguido individualmente perdura.